La manera en que defines tu vida, determina tu destino, tu manera de ver las cosas influirá en cómo empleas tu tiempo, tu dinero, tus talentos y cómo valoras tus relaciones. Si te pidiera que dibujaras un cuadro de tu vida, ¿qué imagen te vendría a la mente? Esa imagen es una metáfora de la vida, es la manera de ver la vida que has tenido, consciente o inconscientemente.
La gente expresa a menudo la perspectiva de sus vidas en la forma de vestir, joyas, automóviles, etc., tu perspectiva determina tus expectativas, valores, relaciones, metas y prioridades. Por ejemplo, si crees que la vida es una parranda, entonces tu valor primordial en la vida será pasarla bien, si ves la vida como un maratón, la perseverancia será valiosa para ti. ¿Cuál es tu visión de la vida?
La biblia nos ofrece tres enfoques o metáforas que nos enseñarán qué es la vida desde la perspectiva de Dios.
1. La vida en la tierra es una prueba. Términos como tribulación, tentación, refinación y purificación se repiten más de doscientas veces en la Biblia. Dios probó a Abraham cuando le pidió que le ofreciera a su hijo Isaac, y a Jacob cuando tuvo que trabajar más años para ganarse a Raquel como esposa. El carácter se desarrolla y manifiesta por medio de las pruebas, la vida en sí, toda es una prueba. Siempre serás probado, serás probado mediante cambios drásticos, promesas retrasadas, oraciones no contestadas, críticas inmerecidas e incluso tragedias sin sentido. He podido comprobar cómo Dios prueba mi fe en los problemas, como Dios prueba donde está mi esperanza al ver cómo uso mis posesiones, y cómo prueba mi amor a través de las personas. Aún los percances más pequeños tienen significado para el desarrollo de tu carácter; la Biblia dice “No os ha llegado ninguna prueba insuperable. Dios es fiel y no permitirá que seáis sometidos a pruebas superiores a vuestras fuerzas; ante la prueba os dará fuerza para superarla” 1 Corintios 10:13
2. La vida es un fideicomiso: Nuestro tiempo en la tierra, nuestro ímpetu, inteligencia, oportunidades, relaciones y recursos son todos dones que Dios nos ha confiado para cuidar y administrar, la verdad es que no poseemos nada en nuestra breve estadía en la tierra. Dios nos presta la tierra y lo que hay en ella mientras estamos aquí. El primer trabajo que Dios le dio a los humanos fue administrar y cuidar las “cosas” de Él en la tierra, es parte de nuestro propósito, todo lo que disfrutamos debemos tratarlo como un encargo que Dios ha puesto en nuestras manos.
“A los que reciben un encargo se les exige que demuestren ser dignos de confianza” 1 Corintios 4:2, Jesús, se refirió a la vida como un encargo “El amo le dijo: ¡Bien, criado bueno y fiel!; has sido fiel en lo poco, te confiaré lo mucho. Entra en el gozo de tu señor” Mateo 25:21
Al fin de tu vida en la tierra serás evaluado y recompensado de acuerdo con la manera en que uses TODO lo que Dios te confió. Mucha gente no se da cuenta que el dinero es ambas cosas, una prueba y un fideicomiso de Dios, “Si no habéis sido fieles con el dinero injustamente adquirido, ¿quién os confiará los bienes verdaderos?” Lucas 16:11 ¿Será que la manera en que manejas tu dinero está evitando que Dios pueda obrar más en tu vida? ¿Se te pueden confiar riquezas espirituales? La vida es una prueba y un encargo, y cuanto más Dios te da, más responsable espera que seas.
Reflexión: La vida es una prueba y un fideicomiso
Versículo: “El que es fiel en lo poco lo es también en lo mucho, y el que es injusto en lo poco lo es también en lo mucho” Lucas 16:10
Pregunta: ¿Qué me ha ocurrido recientemente que ahora veo que era una prueba de Dios? ¿Cuáles son las cosas más grandes que Dios me ha confiado?
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1 comentario:
El autor hace referencia a esta cita "Dichoso el hombre que soporta la prueba; porque si la ha superado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a los que le aman". Santiago 1:12
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