Así ya no seremos niños, Dios quiere que crezcamos hasta ser en todo como Cristo. Efesios 4:14-15
Dios quiere que madures y desarrolles las características de Jesucristo. El crecimiento espiritual requiere compromiso, primero debes decidir crecer, desear crecer; hacer un esfuerzo y persistir en el crecimiento.
Nada le da más forma a tu vida que los compromisos que asumes, ellos pueden servir para tu desarrollo o destrucción, llegamos a ser lo que nos comprometemos a ser. Dime con qué estás comprometido hoy, y te diré lo que serás en 20 años.
Unos tienen temor a comprometerse, otros lo hacen sin entusiasmo y otros asumen un compromiso total con metas mundanas, tales como llegar a ser ricos o famosos. TODO LO QUE ELIGES HACER TIENE CONSECUENCIAS ETERNAS, SERÁ MEJOR QUE ELIJAS CON SABIDURÍA.
El papel de Dios y el tuyo.
Ser semejante a Cristo es el resultado de tomar las mismas decisiones que él y depender de su Espíritu para apoyarte a cumplir con tus decisiones. Debes abandonar algunas rutinas viejas y adquirir nuevas, cambia tu manera de pensar. El Espíritu Santo nos ayudará con los cambios, “llevar a cabo” es nuestra responsabilidad, “producir” es el papel de Dios “Por tanto, queridos hermanos, como siempre habéis obedecido, no sólo durante mi presencia, sino también y mucho más mientras estuve ausente, trabajad por vuestra salvación con profundo acatamiento, pues es Dios el que obra en vosotros el querer y el obrar, según su voluntad" Filipenses 2:12-13
El crecimiento espiritual es un esfuerzo de colaboración entre el Espíritu Santo y nosotros, Dios trabaja con nosotros y en nosotros.
Cambia tu piloto automático.
Para cambiar tu vida debes cambiar tu manera de pensar, toda tu conducta es motivada por una creencia y toda acción es incitada por una actitud. Dios revela “Tengan cuidado de cómo piensan; la vida es modelada pos sus pensamientos” “Sobre todas las cosas, vigila tu corazón, porque de él brotan las fuentes de la vida.” Proverbios 4:23
Cuando decides cambiar tu vida por tu propia fuerza de volundad, dices "voy a comer menos.. haré más ejercicio.. será mas puntual, etc." tu fuerza de voluntad puede producir un cambio a corto plazo, pero finalmente te rendirás, volverás a tus propios patrones. El primer paso para el crecimiento espiritual es cambiar tu manera de pensar, la manera en que pienses determinará cómo te sientes, y cómo te sientes influirá en cómo actúas. El nuevo testamento llama a este cambio mental “arrepentimiento”, si te arrepientes cambias tu manera de pensar y adoptas la manera de pensar de Dios respecto a ti mismo, al pecado, a Dios, a tu futuro, a la vida. Cambiar al modo en que pensaba Cristo tiene dos facetas:
1. Deja los pensamientos inmaduros, que son egoístas. “Hermanos, no seáis como niños en vuestros pensamientos; sed como niños en lo que se refiere al mal, pero como hombres adultos en vuestra manera de pensar.” 1 Corintios 14:20
“Pues los que viven según la carne piensan en las cosas carnales; y los que viven según el espíritu, en las espirituales.” Romanos 8:5
2.Piensa con madurez, enfócate en otros, no en ti mismo.
La vida cristiana es mucho más que credos y convicciones, incluye conducta y carácter, nuestros hechos deben ser congruentes con nuestros credos y nuestras creencias deben ser respaldadas con una conducta semejante a Cristo, el cristianismo no es una religión, ni una filosofía, son una relación y un estilo de vida. El centro de este estilo de vida es pensar en los demás, como lo hizo Jesús. “Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que viene de Dios, para que conozcamos lo que Dios generosamente nos ha dado.” 1 Corintios 2:12.
Reflexión: Nunca es demasiado tarde para empezar.
Versículo: “Y no os acomodéis a este mundo; al contrario, transformaos y renovad vuestro interior para que sepáis distinguir cuál es la voluntad de Dios: lo bueno, lo que le agrada, lo perfecto” Romanos 12:2
Pregunta: ¿Cuál es una de las áreas deonde necesito dejar de pensar a mi manera y comenzar a pensar a la manera de Dios?
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