El ser humano siempre está en busca del "éxito" pero en muchos casos busca el "éxito" que tiene como medida el tamaño de casa donde vive o el número de autos que posee, la marca de ropa que usa, la cantidad de clubes sociales a los que pertenece, la cantidad de personas a quienes somete o sobre quienes tiene poder.
Como una vez expresó Carlos Slim, uno de los hombres más ricos de America Latina, el éxito se debe a cuánta gente te sonríe, a cuánta gente ayudas y a cuanta evitas dañar, trata de que tus triunfos estén incluidos en tus sueños y que tus logros no hayan dañado a tus semejantes, de cuánta gente amas, cuántos te extrañan cuando te vas, trata del amor que le tienes a la naturaleza, a los animales, a las plantas, a los niños, a los ancianos y al mundo en general.
En realidad el éxito se relaciona con cuánta gente haces feliz, con tu deseo de amar y de servir. Si buscáramos alcanzar el verdadero éxito, habríamos muchos más seres exitosos en este planeta, ya que fuimos hechos para amar.
Como una vez expresó Carlos Slim, uno de los hombres más ricos de America Latina, el éxito se debe a cuánta gente te sonríe, a cuánta gente ayudas y a cuanta evitas dañar, trata de que tus triunfos estén incluidos en tus sueños y que tus logros no hayan dañado a tus semejantes, de cuánta gente amas, cuántos te extrañan cuando te vas, trata del amor que le tienes a la naturaleza, a los animales, a las plantas, a los niños, a los ancianos y al mundo en general.
En realidad el éxito se relaciona con cuánta gente haces feliz, con tu deseo de amar y de servir. Si buscáramos alcanzar el verdadero éxito, habríamos muchos más seres exitosos en este planeta, ya que fuimos hechos para amar.