Es indignante ver como en Guatemala nuestros gobernantes y representantes despilfarran y hacen con nuestro dinero lo que se les da la gana. Mientras los diputados y otros, solo llegan a sentarse en sus curules por unas cuantas horas, a proferir insultos unos contra otros y dilucidar como nos sacan más dinero y como pagan menos, del otro lado de su mundo hay otra realidad. Me tope con dos niños, de unos 7 o 6 años aproximadamente, bueno, parecían pero seguramente tenían 10 o 12, la edad no importa, lo importante es que llevaban en sus manos una caja para lustrar zapatos, cobraban Q2.00 por lustre y por lo que vi, su trabajo es más cansado y su jornada más larga que la de los diputados. ¿Será que los señores del congreso y aquellos que llevan las riendas de nuestro país nunca se han topado con uno de estos niños? Si lo hubieran hecho y la parte de su cerebro donde supuestamente va la conciencia no tuviera tanto excremento, se preocuparían por librar a nuestro país, de la pobreza, el desempleo, la corrupción, inseguridad y sobre todo de de ellos mismos.
jueves, 26 de junio de 2008
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